El Rosin es uno de los extractos de cannabis más puros. Se obtiene sin involucrar solventes en el proceso y mediante la acción de dos factores: presión y calor.
La preparación y uso de extractos como el Rosin han dejado de ser una novedad y se han instalado como una tendencia que se desarrolla y crece entre los consumidores de cannabis.
Prueba de ello es la amplia gama de pipas, vaporizadores, bongs y herramientas y materiales especialmente pensados para obtener y consumir Rosin de mejor calidad.
Dentro de las posibilidades de extracciones, el Rosin es uno de los más aromáticos que existe ya que cuenta con gran presencia de terpenos.
¿Qué es el Rosin, cómo se hace y cómo se usa? En este artículo te lo cuento.
TABLA DE CONTENIDOS
- ¿Qué es el rosin?
- ¿Cuánto THC hay en el Rosin y qué tan potente es?
- ¿Cómo se consume el Rosin?
- ¿Cómo conservar el rosin?
- ¿Cuánto dura el efecto del rosin?
- ¿Cómo se hace el Rosin?
- ¿Cuál es la diferencia entre Rosin y Live Rosin?
- Conclusión
¿Qué es el rosin?
El Rosin es un producto ceroso que contiene altas concentraciones de los compuestos activos de la marihuana.
Destaca por ser una extracción que se obtiene aplastando cogollos o hachís a una alta presión y aplicando calor.
El Rosin posee una gran reputación entre los consumidores de cannabis por su alto grado de pureza, ya que no contiene butano, propano u otros productos petroquímicos, usados para fabricar -por ejemplo- el BHO (Butane Hash Oil).
La calidad del Rosin ha ayudado a crecer en popularidad y se desarrolle un mercado especializado en torno a él.
Hay que considerar que la simplicidad en su preparación es un atractivo para consumidores que quieren deleitarse con la experiencia sensorial y psicoactiva con este extracto de cannabis.
Incluso si pensamos en invertir en un potente prensa de rosin, ésta será menos compleja y costosa que un sistema de extracción de circuito cerrado, que es lo que se utiliza para mantener la seguridad de la producción con solventes.
¿Cuán potente es el Rosin?
Dependiendo de la temperatura y la presión utilizadas, el Rosin puede contener concentraciones de THC que van desde el 30 al 70%.
A modo de comparación, una flor suele tener entre un 13% y un 25% de THC, dependiendo de la variedad. El Rosin, al ser un concentrado, puede llegar a ser hasta de dos a cuatro veces más potente que eso.
Sin embargo la pureza varía mucho, especialmente si se utiliza una prensa casera para hacerlo.
En este contexto, se puede esperar razonablemente una pureza de entre el 40% y el 60% para este tipo de producción.
Lo que no está nada mal para una extracción casera y sin solventes involucrados.
Sabemos que la cantidad de THC depende de la variedad utilizada. Hay algunas genéticas más resinosas y con altas concentraciones de THC que son especialmente recomendables para hacer Rosin.
Es el caso, por ejemplo, de la variedad Jack 47 del banco Sweet Seeds que puede llegar a alcanzar más de 20% de THC, lo que la convierte en una flor ideal para prensar.
¿Cómo se consume el Rosin?
El “dab” es la forma de consumo más extendida para el Rosin y consiste en usar un Rig (bong para dabbear) y calentar a altas temperaturas un banger, que es la pieza donde se depositará el concentrado a vaporizar.
En torno a la experiencia de “darse un dab”, el mercado cannábico ha desarrollado una larga lista de parafernalia.
Sin embargo, y si se quiere optar por lo sencillo, se requieren los siguientes elementos:
1.- Rig: es el bong para dabbear.
2.- Banger: es las pieza que debe ser calentada a altas temperaturas para poner el rosin. Suelen estar fabricadas de vidrio, acero inoxidable, titanio o cuarzo. Aunque la mejor experiencia se obtiene con el vidrio.
El banger se calienta por unos 30 a 45 segundos para luego dejarlo enfriar durante un minuto antes de colocar el Rosin que, por acción del calor, se vaporiza.
También existen los Nails que -si bien cumplen la misma función que un banger- no son lo mismo. Existen Nails de titano, también existen nail electrónicos o eNails que por acción de energía eléctrica calientan un quemador.
3.-Tapas o Caps: también son fundamentales en este proceso, ya que ayudan a vaporizar de forma más eficiente el rosin, aunque los Carb Cap han demostrado ser mejor porque mejoran la experiencia de sabor de la calada.
4.- Soplete: también es una herramienta necesaria para consumir Rosin en este formato, aunque en el mercado -actualmente- se pueden encontrar calentadores por inducción magnética, que permiten tener un control en la temperatura más exacto como el creado por la marca Ispire, conocido como The Wand.
5.- Limpieza: ya sea si se usa un banger o un vaporizador, siempre habrá que usar cotones y alcohol para limpiar la cazoleta donde se ponga el rosin. Esto se hace a los segundos de haber terminado la sesión y no se debe esperar mucho más, de lo contrario los restos de resina serán dificiles de remover.
Finalmente comentar que la sofisticación en la experiencia de consumo de Rosin ha permitido desarrollar un mercado de productos exclusivos. Es el caso de los Carb Caps personalizados, Rigs y otros accesorios de vidrio soplado, como también calentadores que permiten configurar a la medida las sesiones de vaporización.
Con respecto al desarrollo de productos, las mejores marcas de vaporizadores se han incorporado al mercado de las extracciones, ofreciendo productos que brindan un experiencia que permita simplificar el proceso y mejorar el control del tiempo, la temperatura y aireación de forma precisa.
Por último no olvidemos que el Rosin también es comestible, lo que lo hace ideal para darle el toque psicoactivo a recetas culinarias y que, a diferencias de las realizadas con materia vegetal, no inunda la preparación con sabor a clorofila.
¿Cómo conservar el Rosin?
Lo ideal es que el Rosin sea protegido en pequeños contenedores de vidrio o silicona. De esta forma se evita que el aire lo degrade, volviéndolo menos potente y despojándolo de sus terpenos.
Con respecto al almacenamiento, sería óptimo mantenerlo refrigerado.
¿Cuánto dura el efecto del Rosin?
Su efecto es más intenso ya que se consume una mayor concentración de THC, aunque puede ser más activo y menos narcótico que el fumar.
A quienes lo consumen por primera vez se les recomienda vaporizar dosis pequeñas, similares en tamaño a la mitad de un arroz, ya que su “pegada” es intensa y rápida, pudiendo generar algún malestar en el consumidor nóvel.
Incluso, dado las características y potencia de este concentrado, no es recomendado su uso en aquellas personas que tienen afecciones cardíacas o sufren problemas de salud mental como ansiedad.
¿Cómo se hace el Rosin?
Existen dos formas para hacer Rosin:
La primera y las más casera, solo necesita de una plancha de pelo y pinzas de carpintero, esta última se utiliza para lograr obtener una presión constante.
Lo ideal en este caso es mantener la temperatura entre los 160-180 °C y colocar el cogollo -que está envuelto en un papel pergamino- en la plancha por unos tres segundos para evitar que se queme.
Las pinzas carpintero sirven para mantener una presión homogénea, pero se debe tener cuidado con romper la plancha ya que su uso no está pensado para esta finalidad.
Como es de esperar, los resultados con esta forma casera de extracción son mucho menos consistentes, el rendimiento del producto es mediocre y, por ende, el Rosin obtenido es de una baja calidad.
La segunda forma es utilizando una prensa hidráulica con placas de prensado calentadas, que compactan la flor que debe estar envuelta en un papel especial que soporte alta temperatura y presión constante.
Las prensas pueden ser bastante costosas, por lo que la mayoría de la gente simplemente adquieren Rosin, o va al growshop de confianza para apretar sus cogollitos.
En ambas formas de prensado con plancha o prensa, necesitaremos usar papel antiadherente para el horno o pergamino de 35 lb, ya que la resina es expulsada de la flor quedando adherida a él.
Luego de finalizado el apriete, se raspa cuidadosamente con un dabber para sacar la cera pegada.
El mercado cannábico también ofrece bolsas de malla de nylon de grado alimenticio que soportan altas temperaturas y también papel de aluminio que cumple la misma función.
También se pueden adquirir herramientas de preprensado que ayudan a distribuir de mejor manera la materia vegetal antes de envolverla en el papel.
Esta forma de envolver ha ido evolucionando con el objetivo de obtener un Rosin más puro.
Actualmente con el papel se busca cubrir la materia vegetal de tal forma que el extracto no entre en contacto directo con las placas de la prensa y así conservar los terpenos en la extracción.
A esta técnica se le denomina “burrito tech” por la forma en que se dobla el papel que, además, permite observar cuando comienza a salir el Rosin y de esta forma ayudarnos a la hora de controlar la presión del apretado.
Las bolsas de malla de nylon son otro elemento que juega un papel importante a la hora de obtener un Rosin más puro.
Para obtener los mejores resultados se recomienda utilizarlas considerando si se va a prensar materia vegetal o hachís.
Para los cogollos se recomienda usar estas bolsitas con un micraje que vaya de las 73 a 220 micras y para el hachís se deben utilizar aquellas que posean una malla de 25 a 45 micras.
Ojo que estas bolsas de nylon se deben utilizar siempre con papel que las recubra y permita recibir la extracción recién prensada.
La presión, la temperatura y el tiempo son factores fundamentales en el proceso de obtención de Rosin.
Contrario a lo que se puede pensar, mantener por mucho tiempo, bajo una alta presión y temperatura no aseguran -en ningún caso- un extracto de calidad.
Se estima que si se utiliza materia vegetal, se debe prensar a una temperatura que vaya entre los 85 y 110 °C. Para el caso del hachís, se debe prensar entre los 65 y 105 °C.
Ahora bien y con respecto a la cantidad de presión, se recomienda que no exceda los 1000 psi (70 kgf/cm2) en el punto de contacto.
Con respecto al factor tiempo, se estima que puede oscilar entre 30 segundos y 2 minutos.
¿Cuál es la diferencia entre Rosin y Live Rosin?
Para hacer Rosin se usan flores y para hacer Live Rosin se usa hachís.
Este producto es más valorado que el rosin ya que tiene una pureza mayor junto con más conservación de terpenos, y por ende mejor sabor y aroma. Además implica más pasos en su fabricación.
Para prepararlo se cosecha el Cannabis, se congela por 24 - 48 horas y después se hace hachís utilizando agua y hielo. Este método de obtención del hachís se conoce como Bubble Hash, Water Hash o Ice-o-lator.
El hachís resultante es de alta calidad ya que no presentará, si se hace bien, restos de materia vegetal, y sólo se obtendrán los tricomas de la flor.
Una vez obtenido el hachís, se puede usar un liofilizador para secarlo usando frío. Esta sería la mejor forma de evitar pérdida de terpenos, cosa que sí podría ocurrir con un secado convencional.
Esta secado o deshidratación suele durar entre 24-48 horas para después pasar al prensado de ese hachís y de esta forma obtener el Live Rosin.
En síntesis, se cosecha, se congela, se hace hachís, se seca el hachís y se prensa.
El resultado es una resina de color blanquecino y si esta bien hecha será muy aromática y sabrosa. Esto dependerá también de la variedad utilizada y si el proceso se hizo de forma correcta.
Live Rosin no se debe confundir con Live Resin, ya que este último si bien ocupa el mismo proceso de congelar después de cosechar, lo que viene después es una extracción hecha con un solvente como Butano.
Conclusiones
El rosin es un concentrado que no requiere solventes para su preparación.
Destaca por su potencia, ya que tiene altas concentraciones de THC, pero también por su aroma y sabor, ya que al no tener restos de material vegetal ni clorofila, y vaporizarse a bajas temperaturas, se pueden apreciar mejor los terpenos.