Riego en el cultivo de cannabis

Si bien hemos explorando técnicas de cultivo, podas, carencias y excesos, nos falta seguir ahondando en cómo influye el riego en el crecimiento.

Antes de entrar en materia quisiera explicar a qué me refiero con sustrato, un término que podría traer confusión entre los nuevos cultivadores.

El sustrato es el material o soporte físico sobre el que se va a desarrollar la planta, se diferencia del suelo ya que este hace referencia a la tierra de cultivo que tendrá distintas propiedades según las características geológicas y ecológicas del territorio.

Ahora bien: Hora de regar.

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Cómo regar las plantas de Cannabis apropiadamente 

Si cultivas en maceteros o en el suelo necesitarás regar tus plantas manualmente. El riego es una parte importante en el cultivo, y saber cómo hacerlo apropiadamente te ahorrará un montón de frustraciones en el futuro.

El cannabis es una planta que necesita abundante agua, sin embargo, como hemos comentado anteriormente, todo en exceso es malo, es por eso que es importante tener la técnica adecuada para darle a nuestros cultivos la mejor agua para evitar excesos y carencias.

Ahora bien, ¿Qué tan seguido debes regar?

Lo que solía hacer antes era meter el dedo en el sustrato y hundirlo para ver si está seco y decidir si regarlo o no, pero eso sólo me daba una pequeña muestra del contenido total del sustrato, no podía saber si en el medio o en el fondo seguía húmedo aún.

Hoy en día utilizo el método de pesar las macetas.

Suena algo raro, lo sé, pero si pesas tus macetas antes de regarlas, luego las riegas, esperas que escurra el exceso de agua y le vuelves a tomar el peso, sabrás diferenciar entre un sustrato húmedo y uno seco.

Si la maceta ha perdido la mitad del peso que tenía cuando estaba húmeda, es el momento perfecto para regar.

Por regla general, deberías regar tus plantas con un cuarto del volumen de la maceta que estamos utilizando, pero esto sólo aplica cuando las plantas están grandes. Si riegas en exceso una planta pequeña sólo implicará problemas.

La forma en la que gusta hacerlo es regar lento, primero humedecer la superficie del sustrato y convertirla en una especie de esponja para absorber el agua de una mejor manera y que no se escape por los costados. 

Muy importante a tener en consideración es la temperatura del agua de riego, la temperatura ideal es de 23° centígrados, puede ser un poco más o un poco menos, lo importante es que no esté muy fría. 

Si riegas con agua fría, la planta no absorberá ciertos nutrientes, presentándose carencias. 

En algunos lugares el agua de de la llave tiene alta presencia de cloro, una buena opción para tratar esto, es dejar airear el agua para que el cloro se evapore en el aire. 

Es importante que no solo reguemos cuando el sustrato esté completamente seco, también tener en consideración si vemos que las hojas se encuentran secas y la planta se ve decaída, con poca vitalidad. Esto también puede ser resultado de las condiciones en las cuales está la planta, como en zonas áridas, donde se utiliza más agua porque la planta necesita mantenerse fresca.

Regar plantas jóvenes o recién germinadas:

En las primeras semanas de germinación las plantas necesitan poca cantidad de agua para continuar su ciclo. Si utilizamos macetas pequeñas necesitaremos regarlas más seguido que con grandes (Mayor cantidad de sustrato, mayor recursos que tiene la planta para absorber.

Es difícil determinar una tabla de riego porque hay factores que influyen como el clima, volumen de la maceta, tipo de sustrato o medio de cultivo, drenaje, etc. La cantidad aproximada de agua para una planta pequeña es de 100-150 ml, y dependiendo de la temperatura, podremos hacerlo cada dos o tres días. 

Regar plantas en etapa vegetativa:

Una vez que la planta muestra un buen tamaño  el crecimiento se acelera, será necesario ajustar la cantidad de agua que le damos, y con ello los nutrientes.

Al llegar a la etapa vegetativa, deberás regar la planta cada día si la maceta es pequeña o cada dos o 3 días si es mediana o grande. Básicamente depende de las condiciones de tu cultivo.

Regar plantas en etapa de floración:

Al llegar a este punto necesitarás mantener el mismo riego que en la etapa vegetativa. Para las plantas automáticas puedes incluso necesitar más agua ya que estarán las 24 horas absorbiendo energía para continuar con su proceso de crecimiento y floración. Pero recuerda primero revisar el peso de la maceta antes de regar.

Regar en la etapa final:

El riego es una de las partes centrales de cultivar cannabis. En la etapa final del crecimiento de la planta es importante regar sin fertilizantes.

Esta es la etapa en donde dejamos que la planta absorba los restos de nutrientes presentes ya en el sustrato hasta agotarlos, preferiblemente utilizando un agua baja en sal.

Acá puedes leer más sobre el lavado de raíces y para qué sirve.

Rango óptimo de pH en la solución de riego

Por definición, El pH (potencial hidrógeno) es la medida de acidez o alcalinidad de una disolución.

Ahora bien, ¿Qué tiene que ver esto con el riego del cannabis?

El cannabis es una planta que le gusta un agua de pH neutro un poco ácido, con esto me refiero a que si bien los nutrientes se añaden con el agua de riego, ésta debe tener un cierto grado de acidez (entre 6.2 y 6.5) para que las raíces absorban los nutrientes. 

En algunas ocasiones podemos encontrar que nuestra planta presenta carencias, y por más que aumentamos la fertilización no hay ninguna mejoría. En estas situaciones el problema puede ser el pH del sustrato. Puede haber un exceso de nutrientes, pero no están disponibles para la planta.

Podemos regular el pH utilizando métodos caseros o productos disponibles en el mercado. La diferencia radica en la exactitud que podemos obtener utilizando productos por encima de los métodos caseros. Pero no es algo definitivo.

Si tu planta presenta carencias, y has estado aportando nutrientes constantemente, sería bueno que midieras el pH del sustrato, para ello, toma un poco de tierra de distintas partes de la maceta, agrega un poco de agua y deja reposar. Al cabo de 15 minutos puedes mezclar y luego medir el pH de esa solución para ver cómo está tu planta.

Rango óptimo de EC en la solución de riego

Ya hablamos de cómo regar, con cuánto regar y el pH. Ahora, qué pasa si aun aplicando todas estas técnicas, nuestra planta no parece estar absorbiendo los nutrientes que le aportamos.

Es ahí cuando tenemos que plantearnos si nuestra planta tendrá una buena conductividad eléctrica.

La conductividad eléctrica, o EC, es una estimación de sales disueltas en una disolución y mediante ella podemos evaluar su capacidad para conducir la corriente eléctrica.

Las raíces de las plantas se alimentan por medio de un proceso fisicoquímico llamado ósmosis, que se basa en la asimilación de líquido por medio de las raíces para luego distribuirlos por las células de la planta. Entonces, si la concentración de sales es demasiado grande, la planta no podrá absorberlos  y generará todo tipo de carencias, de igual manera si es muy baja.

Aquí radica la importancia de medir la EC de nuestros cultivos.

Con esta importante información podemos estimar si nuestra planta tiene una buena cantidad de nutrientes y no tendremos problemas de excesos.

Es importante acotar que el rango de EC apropiado varía dependiendo de la etapa de cultivo en la que se encuentre la planta. Según la etapa en la que se encuentre la planta necesitará más o menos alimento. En las primeras semanas de vida no suelen necesitar alimentos, tampoco después de un trasplante. Sin embargo durante su crecimiento y floración irán requiriendo cada vez más nutrientes y con ello, habrá una mayor EC en el sustrato.

Tips para regar:

Ya que te he explicado este tema, me gustaría compartir unos tips que he ido aprendiendo e implementando personalmente en mis cultivos:

• En la etapa inicial de riego, me gusta utilizar un atomizador para humedecer la planta y luego humedezco un poco a los alrededores, trato de no regar la planta directamente porque es muy débil.

• Me gusta utilizar la tapa del propagador para hacer un efecto invernadero, así mantengo la humedad por más tiempo. Esto mientras la planta acaba de germinar y aún es pequeña.
• También humedezco la tapa del propagador con el atomizador para crear un ambiente de alta humedad y así darle las condiciones ideales a la planta para que se desarrolle.
• Suelo regar a primera hora del día (o cuando empieza el ciclo lumínico si tienes un indoor), esto porque la planta tendrá agua suficiente para poder soportar el calor del día y desarrollar sus procesos.
• Recomiendo nunca regar a pleno sol porque el sustrato está caliente, el agua se calentará y notarás las hojas caídas. Tampoco en la noche porque puede crear problemas de humedad.

• Suelo regar lento, en dos o tres partes. Primero para humedecer y luego aplico el resto con la misma velocidad por toda la superficie.
• En la etapa final recomiendo disminuir el riego, cuidando la humedad en las últimas semanas. Esto para prevenir la aparición de hongos.
• Personalmente, riego sin fertilizantes en la última parte de la floración, entre 2 a 4 semanas antes. Independiente si hago lavado de raíces o no.

Siempre debes tener en cuenta que la forma de regar tiene mucha influencia en cómo se desarrollará la planta, por medio del riego puedes corregir problemas de excesos y carencias. Lo importante es hacer las cosas a tiempo, actuar rápido para no crear problemas graves a largo plazo.

Espero que hayas aprendido un poco más. Te mando un abrazo! 

Hasta la próxima,